LOS ARTÍCULOS PROMOCIONALES MEJORAN LAS TASAS DE RESPUESTA
Los artículos promocionales y los regalos son elementos irremplazables para el marketing, tanto para atraer y fidelizar clientes como para mejorar las tasas de respuesta. Pero, ¿siguen siendo igual de válidos en un momento en el que la publicidad es cada vez más digital?
Los expertos consideran que aunque la comunicación, ya sea personal o publicitaria, esté cada vez más virtualizada, los regalos promocionales siguen siendo importantes para el marketing mix, sobre todo en eventos, congresos y otras situaciones de contacto entre la empresa y su público real o potencial: llaman la atención, se pueden tocar y coger y, comparada con otras estrategias, el contacto que genera esta entre cliente y marca es más intenso.
Incluso el clásico y desprestigiado bolígrafo promocional sigue siendo eficaz, aunque poco a poco se esté viendo reemplazado por las memorias flash USB. Sea como sea, con presupuesto amplio o restringido, lo que hay que tener en cuenta es la creatividad y el objetivo de la comunicación: ¿fidelizar? ¿conseguir respuestas? ¿atraer clientes?.
Los regalos promocionales no son importantes sólo en el contacto personal; también en los correos promocionales son de gran importancia. Un regalo ayuda a superar el “obstáculo” que constituye el sobre. Ya se trate de una tarjeta de cliente o de una moneda para el carrito de la compra, la cuestión es que el receptor esté en contacto con la marca el máximo tiempo posible. Además, los regalos funcionan como estímulo de la respuesta. Los típicos regalos que refuerzan la respuesta son los sorteos, cupones y vales, rebajas, instrucciones para conseguir descargas gratuitas o para ofertas determinadas y limitadas temporalmente.
Un regalo llamativo o especial sirve para captar la atención y distinguir a la marca del resto de anunciantes, señala el instituto Siegfried Vögele. Pero este regalo no proporciona un beneficio personal o inmediato al receptor: el beneficio se hace patente cuando se presenta una ventaja y se crea un estímulo.
Los artículos promocionales y los regalos son elementos irremplazables para el marketing, tanto para atraer y fidelizar clientes como para mejorar las tasas de respuesta. Pero, ¿siguen siendo igual de válidos en un momento en el que la publicidad es cada vez más digital?
Los expertos consideran que aunque la comunicación, ya sea personal o publicitaria, esté cada vez más virtualizada, los regalos promocionales siguen siendo importantes para el marketing mix, sobre todo en eventos, congresos y otras situaciones de contacto entre la empresa y su público real o potencial: llaman la atención, se pueden tocar y coger y, comparada con otras estrategias, el contacto que genera esta entre cliente y marca es más intenso.
Incluso el clásico y desprestigiado bolígrafo promocional sigue siendo eficaz, aunque poco a poco se esté viendo reemplazado por las memorias flash USB. Sea como sea, con presupuesto amplio o restringido, lo que hay que tener en cuenta es la creatividad y el objetivo de la comunicación: ¿fidelizar? ¿conseguir respuestas? ¿atraer clientes?.
Los regalos promocionales no son importantes sólo en el contacto personal; también en los correos promocionales son de gran importancia. Un regalo ayuda a superar el “obstáculo” que constituye el sobre. Ya se trate de una tarjeta de cliente o de una moneda para el carrito de la compra, la cuestión es que el receptor esté en contacto con la marca el máximo tiempo posible. Además, los regalos funcionan como estímulo de la respuesta. Los típicos regalos que refuerzan la respuesta son los sorteos, cupones y vales, rebajas, instrucciones para conseguir descargas gratuitas o para ofertas determinadas y limitadas temporalmente.
Un regalo llamativo o especial sirve para captar la atención y distinguir a la marca del resto de anunciantes, señala el instituto Siegfried Vögele. Pero este regalo no proporciona un beneficio personal o inmediato al receptor: el beneficio se hace patente cuando se presenta una ventaja y se crea un estímulo.